miércoles, 9 de octubre de 2013

Sobre la fe y el conocimiento

En estos tiempos de racionalismo mal entendido algunos nos empezamos a hartar de oír y leer argumentos y diatribas que descalifican dones divinos como la fe, como en el artículo Fe versus información y conocimiento de Gotzone Rekondo, publicado en DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA el pasado viernes día 27. 
Vaya por delante el aviso de que la fe a la que nos referimos nada tiene que ver con esa otra pseudofe a la que nos encomiendan las fuerzas políticas cuando nos instan a creer por fe que las cosas mejorarán, que disminuirán los desahucios, el desempleo, la pobreza, la corrupción o que saldremos de la crisis.
Como muy bien se define en la carta del apóstol Pablo a los hebreos “es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”. Llegados a este punto, podría muy bien abrirse un extenso paréntesis que diera cabida a una ingente lista de testimonios de personas que, sumidas en dramáticas vivencias y situaciones críticas, han depositado su fe y su plena confianza en Dios y han podido así vislumbrar la salida del oscuro túnel en que se encontraban y la solución de sus graves problemas. Pero nos limitaremos tan sólo a resaltar que nuestra fe no carece de fundamento ni está basada en la idea de creer “sin preguntas ni análisis”. El mismo Jesucristo nos impelía no sólo a escudriñar las Escrituras, sino también a preguntarle.
Quizás sea cierto que la Iglesia católica “despreció el conocimiento y promocionó la fe como prueba irrefutable sin preguntas, ni cómodas ni incómodas”, como sostiene el citado artículo, pero también es cierto que una de las reivindicaciones de la Reforma protestante es la promoción y extensión de la lectura y el análisis personal de la Palabra de Dios. 
Podemos afirmar que nuestra fe va unida indisolublemente a la idea de “oigo, leo, pregunto, analizo y creo”. Dios quiere que el ser humano esté informado y adquiera conocimiento. Somos defensores de la compatibilidad e incluso complementariedad entre fe y razón, entre religión y ciencia. Al igual que el ilustre Isaac Newton y otros muchos científicos, procuramos utilizar la razón para explicar las evidencias de la verdad de nuestra fe.

Diario de Noticias de Álava      2 de octubre        Cartas al Director

No hay comentarios:

Publicar un comentario